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Historia de la empresa UVBLED y desarrollo de las lámparas UVB

UVBLED comenzó a fabricar lámparas UVB en 1998.

En aquel entonces, las lámparas eran UVB de banda ancha, emitiendo longitudes de onda en el rango de 280 a 320 nanómetros. Con estas lámparas, la dosis terapéutica (curativa) era aproximadamente 10 veces mayor que la dosis que causaría quemaduras en la piel.

Para prevenir quemaduras en la piel, el tratamiento con estas lámparas de banda ancha debía administrarse en un entorno hospitalario, donde el personal médico podía controlar cuidadosamente y aumentar gradualmente la dosis de exposición para permitir que la piel se adaptara de forma segura.

Las lámparas estándar utilizadas en hospitales eran el modelo TL100W/12, fabricado por Philips Lighting. Durante la venta de estas lámparas, añadimos un filtro para bloquear las longitudes de onda inferiores a 290 nanómetros, ya que estas eran las principales responsables de las quemaduras en la piel.

En el año 2000, Philips comenzó a fabricar lámparas UVB de banda estrecha, que emiten luz específicamente en el rango de 311 a 313 nanómetros. Con estas lámparas, la dosis terapéutica es solo tres veces mayor que la dosis de quemadura, lo que las hace significativamente más seguras.

Comenzamos a fabricar y vender estas lámparas de banda estrecha sin filtros, utilizando principalmente la bombilla PLS9W/01. Los resultados con estas lámparas fueron mejores, ya que los usuarios experimentaron menos quemaduras y tuvieron mayor probabilidad de continuar el tratamiento.

En 2001, abrimos una clínica de tratamiento que utilizaba estas lámparas UVB de banda estrecha. Durante los siguientes 20 años, la clínica, conocida como UVCLINIC, proporcionó 250.000 tratamientos a 4.000 pacientes.

En 2023, Nichia Corporation comenzó a producir lámparas LED UVB capaces de emitir longitudes de onda específicas. Empezamos a desarrollar lámparas con estos nuevos LED e invitamos a los usuarios a probarlas. Sin embargo, los resultados fueron inconsistentes.

Descubrimos que muchos productos LED no emitían las longitudes de onda que anunciaban los vendedores. Algunos fabricantes producían LED económicos etiquetados como de 312 nanómetros para competir con las lámparas Philips, pero los vendían con longitudes de onda diferentes.

Para solucionar este problema, invertimos en un espectrómetro de alta calidad capaz de medir longitudes de onda UVB, ya que los espectrómetros UVB precisos son caros.

Con el espectrómetro, verificamos las longitudes de onda de emisión reales de los chips LED. Finalmente, encontramos un proveedor confiable que proporcionaba chips LED UVB auténticos: no lámparas completas, sino los componentes emisores de luz en bruto.

Solicitamos chips con diferentes longitudes de onda, los distribuimos a los usuarios para que los probaran e identificamos la longitud de onda más efectiva. Posteriormente, solicitamos chips con esa longitud de onda específica en mayores cantidades y comenzamos a fabricar y vender lámparas que los utilizan, con excelentes resultados.

Descubrimos que la dosis terapéutica es aproximadamente 100 veces menor que la dosis de quema. Esto significa que no es necesario aumentar gradualmente el tiempo de tratamiento y se pueden observar mejoras visibles desde el primer día de tratamiento.

Al tratarse de una tecnología nueva, muchos usuarios dudaron inicialmente en cambiar las lámparas tradicionales de banda estrecha de 312 nanómetros. Para fomentar su adopción, ofrecimos una opción de devolución en dos meses.